La base en la que dormiremos son los arcones construidos en madera, que han sido forrados de moqueta y encima de los que hemos colocado unas colchonetas de espuma, parecidas a las que se usan en las tumbonas de verano.
La única complicación es salir del coche, ya que las puertas delanteras quedan cubiertas con la base de los arcones y el portón trasero no tiene apertura interior.
Las colchonetas quedan recogidas en el respaldo del asiento para dejar los arcones despejados.